ALBUM REVIEW: “Afrodhit” (2023) - Iza

The Brazilian music scene is extremely diverse in all its immense context. This is not exactly new. In the midst of so many types of musical genres and melodies, it is very difficult to create sounds or lyrics that sound like something more original. Fortunately, some musicians still manage to do this in the midst of a scenario that, unfortunately, can be considered as “generic”. Within what cannot be cataloged in just a single genre, Iza returns after just over five years since the release of her first album, and now her most recent album, Afrodhit, is under the phonographic spotlight. A representative work, and quite intimate.

Every musician needs time to mature their concepts, their ideas and their thoughts. Just like any human being, by the way. However, when we talk about the act of someone being able to express themselves with the use of words and sounds in a way that is more directed towards the public with the aim of provoking inspiration (among many other types of feelings), it is clear that extra care is required. always something more than welcome. Precisely because of this, this transitional period between the release of the first and second albums evidenced an even more accentuated quality in Iza's work, who certainly is now much more aware of who she is as an artist.

Described by the singer herself (jokingly) as a “therapy session”, this new project reflects who she really is, besides being a singer, as a woman and all her feelings throughout her life. The personal and sound evolution is more than obvious, and here she recognizes herself as the true artist that she is. The process of maturing isn't easy and when you have to put that into music sometimes things don't go as fast as everyone might imagine. Iza was careful in choosing the songs, lyrics and especially in the boldness of the melodies, which undeniably delve into different proposals than anything she had done up to that point.

Firmly expressing herself on subjects that until then she had never commented, the songs reflect her evolution with themes that were previously not an artistic agenda (only personal). Currently, she is experiencing a lighter, more meaningful moment and this is being reflected in the courage to launch a project with so many real nuances, without so many “sentimental maneuvers”. Betting on slightly more challenging themes, the sound is captivating, it is instigating, it is inviting and at the same time it is intrinsically intimate in its lines. Undoubtedly, within her discography (and her entire career), this is her most feminine work, something that dialogues with the reality of women today.

Inspired by different passages of time in her life, the album has a vibrant energy with a strong sound in each and every song. Bringing collaborations with other artists (Djonga, Russo Passapusso, MC Carol, King, L7NNON and Tiwa Savage), the sound material is diverse and authentic. Even in some slightly less expressive moments (with a relatively repetitive sound after a few beats), the final result is far above the average of what is recently done in Brazilian lands (especially being a female-only work). Musically, the essence here is also related to what echoes through the streets and urban alleys, bringing even more representativeness to the work.

Along thirteen authorial tracks, the sound also still has inspirations in some movies that the singer says she likes. Without taking the easy way out (and traditionally following a kind of more commercial “sound trend”), what is heard here is a satisfying variation of styles, which certainly has the potential to please even the most demanding listeners (being these fans or not of her work). There are some very assertive touches of originality, and with the mix of elements chosen, it's impossible to say that this project will be poorly received by the public (or the critics). Also full of personality, the singer herself discarded old songs because they did not reflect her reality.

Vocally, which was already good and is even better. The tone is stronger, the notes echo with more power, the sound range is extended and the bass voice has an extra layer of “brutality”. Whether in the studio or during her live performances, Iza's ability to move through musical notes with such ease is one of her most recognizable trademarks, which immediately puts her on a level above other singers because that's a talent. which is not so easy to find. The personal confidence in what she knows how to do helps everything sound with an even more intense quality, and when her naturally charismatic personality comes into play, there's no "ignoring" her.

Musically well produced in practically all its aspects (only a few points a little excessive in terms of "sound mess" by the mixture of disconnected elements), Afrodhit is an album that brings peace, at the same time that it invites all its listeners to reflect not just about feelings, but also about evolution and maturation. Bringing striking beats, traveling through R&B, the project's narrative has charm, authenticity, romance, explosion and sensuality in the right measure. Nothing is too obvious, and sometimes you have to listen to snippets of songs again to be able to clearly understand everything that is being said. A work that needs to be heard.

La escena musical brasileña es extremadamente diversa en todo su inmenso contexto. Esto no es exactamente nuevo. En medio de tantos tipos de géneros musicales y melodías, es muy difícil crear sonidos o letras que suenen como algo más original. Afortunadamente, algunos músicos todavía logran hacer esto en medio de un escenario que, lamentablemente, puede considerarse como “genérico”. Dentro de lo que no se puede catalogar en un solo género, Iza regresa después de poco más de cinco años desde el lanzamiento de su primer disco, y ahora su más reciente disco, Afrodhit, está bajo los reflectores fonográficos. Una obra representativa, y bastante intimista.

Todo músico necesita tiempo para madurar sus conceptos, sus ideas y sus pensamientos. Como cualquier ser humano, por cierto. Sin embargo, cuando hablamos del acto de que alguien sea capaz de expresarse con el uso de palabras y sonidos de una manera más dirigida al público con el objetivo de provocar inspiración (entre muchos otros tipos de sentimientos), es claro ese cuidado extra se requiere siempre algo más que bienvenido. Precisamente por eso, este período de transición entre el lanzamiento del primer y segundo álbum evidenció una calidad aún más acentuada en el trabajo de Iza, quien ciertamente ahora es mucho más consciente de quién es como artista.

Calificado por la propia cantante (en broma) como una “sesión de terapia”, este nuevo proyecto refleja quién es realmente, además de cantante, como mujer y todos sus sentimientos a lo largo de su vida. La evolución personal y sonora es más que evidente, y aquí se reconoce como la verdadera artista que es. El proceso de maduración no es fácil y cuando tienes que poner eso en la música, a veces las cosas no van tan rápido como todos imaginan. Iza fue cuidadosa en la elección de las canciones, las letras y sobre todo en la osadía de las melodías, que indudablemente ahondan en propuestas diferentes a todo lo que había hecho hasta ese momento.

Expresándose con firmeza sobre temas que hasta entonces nunca había comentado, las canciones reflejan su evolución con temas que antes no eran una agenda artística (solo personal). Actualmente vive un momento más ligero, más significativo y eso se refleja en la valentía de lanzar un proyecto con tantos matices reales, sin tantas “maniobras sentimentales”. Apostando por temas un poco más desafiantes, el sonido es cautivador, instigador, tentador y al mismo tiempo intrínsecamente íntimo en sus líneas. Sin duda, dentro de su discografía (y de toda su carrera), este es su trabajo más femenino, algo que dialoga con la realidad de la mujer actual.

Inspirado en diferentes pasajes de su vida, el álbum tiene una energía vibrante con un sonido fuerte en todas y cada una de las canciones. Trayendo colaboraciones con otros artistas (Djonga, Russo Passapusso, MC Carol, King, L7NNON y Tiwa Savage), el material sonoro es diverso y auténtico. Incluso en algunos momentos un poco menos expresivos (con un sonido relativamente repetitivo tras unos compases), el resultado final está muy por encima de la media de lo que se hace recientemente en tierras brasileñas (sobre todo tratándose de una obra exclusivamente femenina). Musicalmente, la esencia aquí también se relaciona con lo que resuena por las calles y callejones urbanos, dando aún más representatividad a la obra.

A lo largo de trece temas de autor, el sonido también tiene inspiraciones en algunas películas que la cantante dice que le gustan. Sin tomar el camino fácil (y tradicionalmente siguiendo una especie de “tendencia de sonido” más comercial), lo que se escucha aquí es una variación satisfactoria de estilos, que ciertamente tiene el potencial de complacer incluso a los oyentes más exigentes (sean estos fanáticos o no). de su obra). Hay algunos toques de originalidad muy asertivos, y con la mezcla de elementos elegidos, es imposible decir que este proyecto será mal recibido por el público (o la crítica). También llena de personalidad, la propia cantante descartó viejas canciones porque no reflejaban su realidad.

Vocalmente, que ya era bueno y es aún mejor. El tono es más fuerte, las notas resuenan con más potencia, el rango de sonido se amplía y la voz del bajo tiene una capa extra de “brutalidad”. Ya sea en el estudio o durante sus presentaciones en vivo, la habilidad de Iza para moverse a través de las notas musicales con tanta facilidad es una de sus marcas registradas más reconocibles, lo que la coloca inmediatamente en un nivel por encima de otros cantantes porque ese es un talento que no es tan fácil de encontrar. . La confianza personal en lo que sabe hacer ayuda a que todo suene con una calidad aún más intensa, y cuando entra en juego su personalidad naturalmente carismática, es imposible "ignorarla".

Musicalmente bien producido en prácticamente todos sus aspectos (solo unos puntos un poco excesivos en cuanto a "desorden sonoro" por la mezcla de elementos inconexos), Afrodhit es un disco que trae paz, al mismo tiempo que invita a todos sus oyentes a reflexionar no solo sobre los sentimientos, sino también sobre la evolución y la maduración. Trayendo ritmos impactantes, viajando a través del R&B, la narrativa del proyecto tiene encanto, autenticidad, romance, explosión y sensualidad en la medida justa. Nada es demasiado obvio y, a veces, hay que volver a escuchar fragmentos de canciones para poder entender claramente todo lo que se dice. Una obra que necesita ser escuchada.

O cenário musical brasileiro é extremamente diverso em todo o seu imenso contexto. Isso não é exatamente nenhuma novidade. No meio de tantos tipos de gêneros musicais e melodias, de uma certa maneira, é muito difícil criar sons ou letras que soem como algo mais original. Felizmente, alguns músicos ainda conseguem fazer isso em meio a um cenário que, infelizmente, pode ser considerado como “genérico”. Dentro do que não pode ser catalogado em apenas um único gênero, Iza volta depois de pouco mais de cinco anos desde o seu o lançamento do seu primeiro álbum, e agora está sob as luzes dos holofotes fonográficos o seu álbum mais recente, Afrodhit. Um trabalho representativo, e bastante intimista.

Todo músico precisa de tempo para amadurecer os seus conceitos, as suas ideias e os seus pensamentos. Assim como qualquer ser humano, aliás. No entanto, quando falamos sobre o ato de alguém conseguir ser expressar com o uso das palavras e de sons de uma maneira mais direcionada ao público com o objetivo de provocar inspiração (dentre tantos outros tipos de sentimentos), é notório que um cuidado extra é sempre algo mais do que bem-vindo. Justamente por isso que esse período de transição entre o lançamento do primeiro e o segundo álbum evidenciou uma qualidade ainda mais acentuada no trabalho da Iza, que certamente agora está muito mais consciente de quem ela é como uma artista.

Descrito pela própria cantora (em tom de brincadeira) como uma “sessão de terapia”, esse novo projeto reflete quem ela realmente é, além de cantora, como mulher e todos os seus sentimentos ao longo de sua vida. A evolução pessoal e sonora é mais do que óbvia, e aqui ela se reconhece como a verdadeira artista que ela é. O processo de amadurecer não é fácil e quando você precisa colocar isso em forma de música, as vezes as coisas não são tão rápidas quanto todos podem imaginar. Iza foi cautelosa na escolha das músicas, das letras e principalmente na ousadia das melodias, que de maneira incontestável, mergulham em diversas propostas diferentes a tudo o que ela já havia feito até este momento.

Expressando a si mesma com firmeza sobre assuntos que até então ela nunca havia comentado, as músicas refletem à sua evolução com temas que antes não eram uma pauta artística (apenas pessoal). Atualmente, ela vive um momento mais leve, mais significativo e isso está sendo refletido na coragem de lançar um projeto com tantas nuances reais, sem tantas “manobras sentimentais”. Apostando em temas um pouco mais desafiadores, o som é cativante, é instigante, é convidativo e ao mesmo tempo é intrinsicamente intimista em suas entrelinhas. Sem dúvidas, dentro de sua discografia (e de toda à carreira), esse é o trabalho mais feminino dela, algo que dialoga com a realidade das mulheres atualmente.

Inspirando-se em diversas passagens do tempo de sua vida, o álbum tem uma energia vibrante com um som marcante em toda e qualquer música. Trazendo colaborações com outros artistas (Djonga, Russo Passapusso, MC Carol, King, L7NNON e Tiwa Savage), o material sonoro é diverso e autêntico. Mesmo em alguns momentos um pouco menos expressivos (com um som relativamente repetitivo após algumas batidas), o resultado final é muito acima da média do que é recentemente feito em terras brasileiras (especialmente sendo um trabalho unicamente feminino). Musicalmente, a essência aqui se relaciona também com o que ecoa pelas ruas e vielas urbanas, trazendo ainda mais representatividade para o trabalho.

Ao longo de treze faixas autorais, o som também ainda tem inspirações em alguns filmes que a cantora diz gostar. Sem optar pelo caminho mais fácil (e tradicionalmente seguir uma espécie de “tendência sonora” mais comercial), o que é ouvido aqui é uma satisfatória variação de estilos, que certamente tem o potencial para agradar até mesmo os ouvintes mais exigentes (sendo estes fãs ou não do trabalho dela). Há alguns toques muito assertivos de originalidade, e com à mistura de elementos escolhidos, é impossível dizer que este projeto será mal recebido pelo público (ou pelos críticos). Repleto também de personalidade, a própria cantora descartou músicas antigas porque não refletiam à sua realidade.

Vocalmente, o que já era bom e está ainda melhor. O tom está mais forte, as notas ecoam com mais potência, o alcance sonoro está mais prolongado e a voz grave tem uma camada extra de “brutalidade”. Seja em estúdio ou durante suas performances ao vivo, a habilidade da Iza em transitar pelas notas musicais com tanta facilidade é uma de suas marcas mais reconhecidas, o que de imediato, já a coloca em um patamar acima das demais cantoras porque isso é um talento que não é tão fácil de ser encontrado. A confiança pessoal no que ela sabe fazer ajuda tudo a soar com uma qualidade ainda mais intensa, e quando à personalidade dela naturalmente carismática entra em cena, não há como “ignorá-la”.

Musicalmente bem produzido em praticamente todos os seus aspectos (apenas alguns pontos um pouco excessivos em termos de “bagunça sonora” pela mistura de elementos desconexos), Afrodhit é um álbum que traz paz, ao mesmo tempo em que convida todos os seus ouvintes a refletirem não apenas sobre sentimentos, mas também sobre evolução e amadurecimento. Trazendo batidas marcantes, viajando pelo R&B, a narrativa do projeto tem charme, autenticidade, romance, explosão e sensualidade na medida certa. Nada é muito óbvio, e às vezes é preciso ouvir novamente alguns trechos das músicas para poder entender claramente tudo o que está sendo dito. Um trabalho que precisa ser ouvido.