Un lunes súper diferente 🎶✨ [Esp - Eng]

about 17 hours ago

Siempre he defendido la idea de que la música es cura para el alma y capaz de levantar hasta el corazón más triste. Entonces cuando la música sale de tu interior es más especial el sentimiento. Hacer el mundo mejor desde las notas que salen de la garganta se siente bien, me hace sentir bien.

Vengo cantando desde pequeña primero en la escuela, en la iglesia, después en pequeñas actividades, y más tarde en grandes escenarios. Para Hive lo he echo bien poco, no como quisiera ni cuanto quisiera, porque no cuento con tecnología de apoyo, pero aún me queda contarles qué tal se sintió, en qué andaba y por qué estaba ahí y eso es justamente lo que haré.

Los lunes tienden a ser odiados por ser causantes del fin del descanso entre semana y semana, pero este lunes marcó una bella diferencia. El lunes de esta misma semana fue continuidad de algo que comenzó en los meses de mediados de año y sobre lo que compartí un post también. El festival provincial de artistas aficionados me dió el oro que me permitió llegar hasta esta semana, y esta semana definió si tendré que ir a Holguín a por un premio mayor o no.

La mayoría de mis historias comienzan esperando el bus para llegar hasta Pinar del Río (no voy a decir eso de nuevo, pero tampoco puedo dejar de mencionarlo). Pude llegar en tiempo al lugar de la cita artística, que sería en la Universidad de Ciencias Médicas de la provincia. Allí hicimos un recibimiento a lo cubano para el jurado que venía evaluar a quienes nos presentábamos para audicionar.

Entre nervios y buenos deseos nos dividimos por manifestaciones artísticas y cada cuál se fue hasta el lugar en el que iba a suceder todo. Nosotros los de música ya nos conocemos, y pues, por ser de música, no hay tensiones en los alrededores.

El grupo que estaba allí en sus pruebas de sonido tocaron canciones que todos conocíamos, yo aproveché y pedí "Hotel California" (al menos la intro del tema) porque sonaban como si fueran la banda original que la toca. Con ese fondo musical me maquillé y en un momento salí a cambiar mi vestuario.

Por temas de logística y de audio, nos cambiamos de locación para el teatro grande, que tiene luces, fondo, y es más bonito. Eso fue después que danza terminara su audición.

Entonces comenzó la pasión. Pusimos las pistas en la computadora y comenzó a cantar la primera. Más que una prueba se sintió como un espectáculo lleno de vibras en el que todos dimos lo mejor de cada cuál para satisfacer a los presentes. Talento había de sobra: buenas voces, buen repertorio y carisma. Todos persiguiendo el mismo sueño de ocupar un lugar nacional.

Fueron pasando hasta que llegó mi turno. ¡Mi turno! ¡Amé mi presentación! Nervios no tuve jamás. En parte porque estoy acostumbrada a los concursos y a los jurados, y en parte porque domino el tema. Para audicionar escogí "Vereda Tropical" con un ritmo que tiene de cha cha chá y un poco de son. Creo que las fotos hablan solas.

Esas las hizo Maybelis, alguien muy especial que llegó a mi vida en las vacaciones de 2024 con el campamento de verano y que también estaba audicionando. Ella supo captar la escencia de la interpretación.

Al final la foto juntos no podía faltar. Más bien fueron dos: los compinches, y después de las palabras finales por parte del jurado y a modo de resumen de lo visto y de agradecimiento de nuestra parte por el tiempo dedicado a nosotros, otra foto en la que sí salían todos. Todos los valientes que subimos a un escenario con un sueño, un talento y una voz.

Justamente por eso este lunes no fue difícil madrugar, tampoco salimos de las casas con sueño, o sin deseos de salir pidiendo permiso a un pie para mover el otro.

Era lunes, pero un lunes diferente, un lunes mejor, y ojalá todos fueran así; llenos de música, alegría, color, amigos y diversión.

Gracias por leer.Con cariño: Vicky ❤️

I have always believed that music is a cure for the soul and can lift even the saddest of hearts. So when music comes from within you, the feeling is even more special. Making the world better through the notes that come from your throat feels good—it makes me feel good.

I've been singing since I was little—first at school, then in church, later in small events, and eventually on big stages. I haven't done it much for Hive, not as much as I'd like or how I'd like, because I don't have the necessary technology. But I can still tell you how it felt, what I was up to, and why I was there—and that's exactly what I'll do.

Mondays tend to be hated for marking the end of the weekend, but this Monday was a beautiful exception. This Monday was the continuation of something that started in the middle of the year, which I also shared in a post. The provincial amateur artists festival earned me a gold award, which allowed me to reach this week—and this week would determine whether I'd go to Holguín for a bigger prize or not.

Most of my stories begin with waiting for the bus to Pinar del Río (I won't say it again, but I can't leave it out either). I made it on time to the artistic gathering, which was held at the University of Medical Sciences in the province. There, we gave the judges a warm Cuban welcome as they arrived to evaluate those of us auditioning.

Amid nerves and good wishes, we split into artistic categories, and each group went to their respective venues. Those of us in music already know each other, and since it's music, the atmosphere is tension-free. The band doing their soundcheck played songs we all knew—I even requested "Hotel California" (at least the intro) because they sounded just like the original band. With that musical backdrop, I did my makeup and later stepped out to change into my performance outfit.

Due to logistics and audio issues, we moved to the main theater, which has lights, a backdrop, and is much nicer. That was after the dance auditions ended. Then the passion began.

We loaded the tracks onto the computer, and the first singer began. It felt more like a vibrant show than an audition, with everyone giving their best to impress the audience. There was plenty of talent: great voices, strong song choices, and charisma. We were all chasing the same dream—to earn a spot at the national level.

One by one, they performed until it was my turn. My turn! I loved my performance! I wasn't nervous at all—partly because I'm used to competitions and judges, and partly because I knew my song inside and out. For the audition, I chose "Vereda Tropical," with a rhythm that blends cha-cha-chá and a touch of son. I think the photos speak for themselves. They were taken by Maybelis, someone very special who came into my life during the 2024 summer camp. She captured the essence of the performance perfectly.

Of course, we couldn't miss a photo together afterward—or rather, two photos: one of us as partners-in-crime, and another group photo with everyone after the judges' final remarks and our thanks for their time. A photo of all the brave souls who took the stage with a dream, talent, and a voice.

That's exactly why this Monday wasn't hard to wake up for. We didn't leave home sleepy or reluctant to take even a step outside. It was a Monday, but a different kind of Monday—a better Monday. I wish every Monday could be like this: full of music, joy, color, friends, and fun.

Thanks for reading.

With love: Vicky ❤️